Catarrazo imposible en el peor finde de estudio de los últimos tiempos. Ha sido un día de gastar mil paquetes de pañuelos y sobre todo muy poco productivo. Espero estar mejor mañana, porque viene una de las peores semanas del curso y no estoy bien.

Laura.

Seis meses

En medio año, seis meses, volveré a Londres. Ya está casi todo arreglado, cogeremos el avión por la mañana para aprovechar el día. Estaremos una semana allí, pateándonos una de las ciudades más bonitas que he visto en mi vida, y yo disfrutaré como una enana. Traductora familiar. Me muero de ganas de que sea 24 de agosto.

Y además para dentro de seis meses se habrá acabado esta vorágine de exámenes, de trabajos, de fechas a recordar, de deberes, de funciones que no salen, de comentarios de texto, de láminas, de filósofos, de profesores incompetentes, de epígrafes, de teoría y de práctica... arg.

Ocho exámenes la semana que viene. Ocho. Aún no sé como hemos llegado a esto, pero ahí está el número. Supongo que tenemos que... ¿agradecer? que ninguno sea ni filosofía, ni historia, las dos más chungas para mi gusto. Pero están economía, geografía y mates. Sobre todo mates. No quiero estudiar aún más en Semana Santa, jopé.

Pero siempre queda tiempo para los pequeños placeres que me da esta vida. Y es que hoy he enviado un par de escritos al primer concurso de la temporada, el Mari Puri Express. Sí, esa cara de WTF que tenéis ahora mismo también la puse yo cuando vi el título pero... me hace ilusión. Es internacional. Y si los planetas se alinean y consigo ganar algo... bien recibido será. Desde luego, subiría la moral.

Laura.

Escribo en un momento de respiro del estudio filosófico. Descartes y Locke no son nada fiesteros, no señor. Yo pensaba que iban a ser un poquito más lógicos que los antiguos, o al menos que se iban a dejar estudiar un poco mejor. Pues no, ¿cómo algo de filosofía va a ser accesible para mí? Eso nunca, nunca jamás. Así que aquí estoy, peleándome con Descartes. Podía haber cerrado la boquita en su momento, oiga.

Han sido unos días... intensos. El martes hicimos el de literatura. Casi doy palmas con las orejas cuando veo las dos preguntas de más puntuación: generación del 98 (4 puntos) y autores y características del 27 (3 puntos). Dos generaciones, ¡siete puntos! Me quedé atascadísima en la poesía del romanticismo, que eran dos puntos, pero Cadalso que era el punto restante creo que lo bordé. Así que veamos que sale. De momento, hoy nos hemos cruzado a María cuando salíamos de hacernos la foto de la orla charlando. Sus palabras textuales: "Sí, sí, reíros ahora, ya se os quitará la risa cuando veáis las notas de literatura". Tengo miedo, sí. Que yo creía que me había salido bien... joer.

La orla. Otro tema que daría para un libro. Flashazos que te dejan cegata, verte genial en un espejo y salir en la foto con una cara de pan que no te la quita nadie. Pero en serio, ¿por qué pasa eso? Debe ser que somos todos unos narcisistas de la leche, pero yo juraría que el ojo pipa de la foto no lo tenía tres segundos antes.

Pablo se fue el lunes a Japón, y aún no nos ha dado tiempo a echarle de menos. Supongo que lo notaremos el domingo, cuando nos reunamos otra vez y notamos que al decir "¡Japo, baja yaa!" no baja nadie. Aunque haya bocadillos y palomitas.

He escrito. He escrito mucho. Mucho para lo que venía escribiendo últimamente, quiero decir. Un microrrelato de homenaje a Ana María Matute y un relato paranoide. Y quiero escribir mucho más, quiero que se me queden los dedos secos de teclear historia, pero no hay tiempo. Ahora entiendo todo lo que querían decir mis queridos amigos de 2º del año pasado. El temario no es difícil. Lo que cuesta es cuadrarlo todo en unos horarios que se quedan cortos y unas tardes que no dan para más. Y a eso hay que sumarle EOI, taller y... ¿vida social? Bueno, la justa.

Laura.

Felicidades, ENANA

Por aquí la última vez, te lo prometo.

Espero que este día de tu dieciocho (sí, sí, dieciocho) cumpleaños haya sido perfecto. Bueno, ya te lo he dicho todo en persona, por tarjeta gigante y tuenti, face y demás. Eres muy grande, aunque te llame pequeña, enana y todo eso.

Y como te felicito desde el blog, este pequeño proyecto que empezamos en agosto para contar nuestras andanzas por segundo de bachiller, pues saco el tema del curso (inevitable, lo siento). Que lo vas a sacar con notazas. Con un catorce, o con un quince si hace falta. Y también la EOI, y te van a dar la beca, y nos vamos a pasar un verano que te mueres. Y cuando seamos universitarias, y no estemos sufriendo este año, ya ni te cuento. Qué felices vamos a ser, jojojo.

Y eso. Que te quiero. Te quiero mucho. Gracias por todo, una vez más.

Laura.

Every second counts

3.37 de la mañana. Y aún estoy estudiando literatura. De hecho, este es uno de los descansos. Es lo que tiene salir viernes tarde y que te convenzan para ir a comer el sábado por la mañana y a una despedida por la noche. Diría que me arrepiento de no haber estudiado más, pero no sería cierto, porque (especialmente el viernes) han sido de esos días que quedan en la memoria, de los que te acuerdas cuando ya no puedes más.

Ahora, mientras cabeceo sobre el teclado intentando memorizar los autores del 27, me acuerdo de la cara de Sara al entrar en la cocina de mi casa, de Hey There Delilah en el Singstar, del brownie y de la tarta, de Crucis y Almu que han acabado la carrera (enhorabuena desde aquí también!), de la tarjeta gigante, del papel reciclado y de Pablo que se nos va el lunes. Aún se hace raro pensar en esto último. Mañana (hoy, en realidad), va a ser un día rarísimo.

Claro que tendré que hacer otra entrada, porque la mencionada arriba junto con la cocina se merece muchísimo más que esta cutrez en la que me quejo de la literatura.

Laura.

El bebé de mis primos va a ser niño. Por tanto, he perdido la apuesta con mi primo de diez años.

He escrito el primer microrrelato de la temporada.

Vi, por fin, la peli de El discurso del rey. Me gustó.

Ayer hice la primera parte de tres del examen de febrero de la EOI. Muerte. Espero tener una nota decente.

Mañana toca la segunda parte. Pensaba repasar. No he hecho nada.

Tengo Tumblr. Es un vicio.

Debería seguir leyendo Cien años de soledad, o la semana que viene será chunga en cuanto a trabajo que hacer.

Ha perdido el Barça.

Me muero de ganas de que llegue este viernes.

Laura.

Tireness

Empezamos la semana de bajón. No todo podía ser perfecto.

Me han dado algunos exámenes y, salvo Geo, no han ido nada mal. Pero no es por eso, faltaría más: he aprendido a no deprimirme por las notas.

Es solo la sensación de intentar conciliar, la sensación de intentar adaptarte a todos los planes y ver que a otro solo le "viene bien" una fecha. Es la sensación de sentirte tonta por reservar unas entradas con ilusión y que al día siguiente te digan que no saben si irán, que depende de como lleven el examen que hay SEIS días después. ¿Soy la única que no necesita pasarse estudiando TODAS las malditas tardes? ¿Soy la única que no ve nada grave en salir un sábado por la noche aunque el viernes siguiente haya un examen, o a celebrar un cumpleaños como Dios manda?

Mañana empezaré de nuevo, supongo.

Laura.

Happy family

¡Grandes noticias familiares! Cuando estábamos a punto de cenar, ha llamado mi prima Bea. Para los que no saben de quién hablo, es mi única prima por parte de madre, y mi ejemplo a seguir: se ha sacado su carrera, viaja por todo el mundo, da conferencias, investiga en su campo... y ahora se va a casar. ¡Que contenta me he puesto cuando nos lo ha contado! Falta aún mucho tiempo (de hecho, habré acabado primero de carrera para el día de la boda), pero me hace muchísima ilusión. He ido a pocas bodas en mi vida, y la verdad es que siempre me emocionan mucho este tipo de cosas. Que sensiblera soy, coñe xD.

Además, ya queda poco para saber el sexo del bebé que va a tener mi primo también, y estoy por aumentar la apuesta que hice con mi primo enano... Yo digo que va a ser niña, el instinto me lo dice. Otros que van a ser unos padres estupendos.

Están siendo unos días moviditos, y yo sigo escribiendo. Con la tontería, ya tengo otro poema, el primero en mi vida que no es de verso libre. Estoy muy feliz con estos días de máxima producción literaria. A ver si aprovecho que tengo pausa de exámenes.

Laura.

No one will know

Hoy ha sido uno de esos días que te quieres morir antes de que llegue el recreo siquiera. Para cuando dieron las 11.10, hora que marca el rato de relax de la mañana, yo ya habíua dos exámenes y entregado un comentario de texto.

Lo raro es que no estoy cansada. Tras unos días destrozada físicamente, voy mejorando. Esperemos que siga así.

¡Tengo unas ganas locas de ir al taller mañana!

Laura.

Mañana tengo examen de Geografía, pero no pienso hablar de ello. Me da coraje que en la nube de etiquetas que señala los temas que más menciono en mis entradas, Geografía esté en el primer lugar. Con las mil y una prácticas que nos manda a diario, es normal, pero quiero cambiarlo. Más vale que vaya bajando.

Este finde ha sido de estudio, básicamente. En los descansos de los libros aprovechaba para hacerle las correcciones a la poesía y para empezar un nuevo relato. Otro proyecto por ahí, que ya llevaba dos hojas, ha decaído un poco porque no se me ocurre ningún final lógico. Al final tiraré por el lado fantástico, lo acabo viendo, pero quiero aplazar ese momento por si tengo alguna inspiración. El que empecé ayer creo que va a quedar un poco cursi, pero debe ser que estoy en la semana del azúcar inyectado directamente en vena. Lo dejaré pasar y ya está. Al fin y al cabo, la semana del drama del año pasado dio grandes resultados. Quién sabe lo que puede pasar.

Por otro lado, quiero hablar de Selectividad, que parece mentira que este blog esté dedicado a la vida de un estudiante en su último año de instituto. Es una buena noticia: creo que le estoy perdiendo el miedo. El viernes hicimos el examen de historia hasta las guerras carlistas, el primero idéntico al que nos encontraremos de hoy en cuatro meses. Y... no fue tan horrible. Creo que podría haberme lucido más en el tema (Fernando VII), pero no es nada que no pueda solucionarse con unos días más de estudio que seguro tendré antes de selectividad. A Inglés nunca le he tenido pánico, a Lengua y a Historia se lo voy perdiendo poco a poco, Geografía creo que la superaré definitivamente mañana... ¡y ya les llegará el momento a Economía y Mates!

Probablemente dentro de tres meses y medio, cuando esté a apenas un par de semanas de Selectividad, esté histérica y no recuerde nada de lo que estoy escribiendo ahora, que suena tan tranquilizador y maravilloso. Pero que quede constancia.

Laura.

PD: Esta semana vuelve Glee, al fin, y también CCAVM después del parón número 84897547386. Pintan bien, ambas.

Poetry

He vuelto a escribir en serio. Llevo todo el día feliz por la maldita poesía, porque es la primera que me sale con una extensión decente. Cincuenta versos. Y me gusta como ha quedado, me gusta esa influencia tan "fletística". Esa tía sí que es una poeta de las grandes. Tengo unas ganas locas de leer más de ella.

En cuanto a la mía, ayer escribí los 20 primeros versos en el taller y hoy los 30 últimos en clase de filo. Ahora solo queda corregirla mil y una veces, ordenar los versos, darle un título. Después, probar suerte y esperar.

Mañana primer examen "a lo selectividad" de historia. Cinco preguntas cortas a elegir tres, y a elegir tema o comentario de texto. Ahora estoy en fase histérica "AAAH NO ME SÉ NADA". Queda una noche muy larga por delante.

Laura

Vamos a tocar el amanecer
Con la punta de los dedos
Vamos a oler la nieve
A derretirla con un beso

Llevo unos días de dormir poco y mal y, lo más preocupante... no es por exámenes. Y es que aún apenas hemos empezado, a pesar de todas las caras largas y el cansancio mal disimulado.

El viernes pasado hicimos el de Lengua-de-recuperación-que-había-que-hacer-aunque-hubieras-aprobado, el viernes Inglés y hoy Economía. No me puedo quejar, aunque la haya liado parda con el enunciado de fichas de almacén. Para mí que fue el subconsciente que me traicionó, tan deseosa estaba yo de que no cayera el PMP. Pues sí cayó, claro que cayó, pero me dio por leer en el enunciado que había que hacer la ficha de almacén con uno de los dos métodos vigentes en el Plan de Contabilidad General y me fui como loca a hacerlo por el FIFO. Y había que hacerlo por los dos. Pero bueno, es uno de esos errores que cometes durante el curso para darte cuenta de lo que debes hacer en selectividad: ¡leer bien los enunciados! Por cierto, también me jorobó de sobremanera que apenas cayera medio punto de gráfico PERT. Con lo que me costó entenderlo... y digo lo mismo del GANT.

(y me callo ya, que para pocos lectores que tengo la mitad me van a abandonar por no ser de sociales y no entender ni papa de lo de arriba xD)

Así que estos días toca intensivo de hincar codos para presentarnos con garantías al examen de historia del viernes. Porque los planes que vienen... ilusionan. Monólogos en la Gran Vía, karaoke con los locos estos, más tardes de Wii, reencuentros en el pueblo (hace demasiado que no voy...). ¡Y habrá que ir organizando el verano!

Laura.