Al final hemos optado por no posponer tanto la compra de los libros y así nos evitamos el estrés de los días antes de empezar el curso. Así, hoy tres nuevos y hermosos libros han llegado a mi casita. Historia, Lengua, Inglés.
El de Historia ya lo había visto, pero tenerlo entre las manos y saber que irá en mi mochila cuatro días a la semana no ha ayudado a suavizar la depresión. He descubierto aún más hojas sin una mísera fotografía y a letra tamaño diez. Mi hermano se ha reído de mí diciendo que él no tendría que darlo porque cogerá ciencias. Yo le he recordado que Historia es asignatura común para todo 2º de bach. Me he sentido un poco mejor.
Luego Lengua, la misma editorial que el año pasado. Me deprime tener cinco temas acerca de los timos de texto, que era lo que hacíamos el año pasado en una hoja.
E Inglés, la misma decepción de todos los años. 52 euros para que el primer tema sea el present y el past simple. Penoso. Pero bueno, supongo que es un trago que hay que pasar. Me jode que sea de los libros que menos voy a abrir y valga tres veces más de lo que me voy a gastar en Sinsajo.
Sinsajo, que a lo mejor llega a mis manos el día 31. Cosas de comprar los libros siempre en la misma librería, las dependientas te conocen y te hacen favores. Ojalá les llegue, ojalá. Si no me voy a aburrir horrores en la playa. No me veo capaz de pasar la semana entera escribiendo como hice en el pueblo.
Mañana piscina y, esperemos, tarde con Carmen (futura co-redactora del blog, yeah). Es una tarde que vengo necesitando desde hace un tiempo.
Laura.
