29 de octubre de 2010

Too much, too soon

¿Historia? Bien. La mañana ha sido de infarto, pocas veces habíamos estado tan hundidos antes de un examen como antes de este. Al final cuento con final feliz, no ha ido mal. Tres preguntas contestadas con absoluta seguridad, una que creo que me he quedado corta y otra que... bueno, no me enfadaré si me baja porque está bastante cutremente redactada. Al manos esta vez me he organizado bien el tiempo. Aunque, por supuesto, la caligrafía ha ido empeorando hasta llegar a límites insospechados en el último párrafo. Espero que no se fije mucho en eso...

Y un ocho en lengua, la alegría del día.
Foto legendaria donde las haya.

Tarde de cine, Rumores y mentiras. Un poco americanada, pero las frases míticas...

-Hola, ¿dónde puedo encontrar la Biblia?
-En los best-sellers, al lado de Crepúsculo.

En fin, primer viernes que salgo en mucho, mucho tiempo. Ha venido bien.

Y mañana... ¡al pueblo! Extrañamente me muero de ganas. Echo de menos a la gente, y como vamos a ser poquitos... pues casi mejor que en el verano. Y que frrrrío voy a pasar, coimes.

Ah, y voy a aprovechar para avanzar en la novela, que la tengo abandonadísima. ¿Lo mejor? Voy a beber de las fuentes directas de anécdotas, descripciones y sensaciones. Mis abuelos. Ella tenía tres años, él creo que 11, cuando empezó todo. Nadie mejor sin ellos para plasmarlo en palabras.

Laura.

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